Estudiar desde casa: estimulación de niños con déficit de atención

La llegada del COVID-19 no solo ha generado un cambio drástico en el cuidado diario y la higiene, sino que también ha modificado la forma de relacionarse con el entorno. La falta de contacto físico y el cambio de “presencial” a “remoto” provocó una gran sensación de aislamiento a nivel emocional, que también trajo aparejados cambios en cuanto a las habilidades comunicacionales, percepción, capacidad de análisis y concentración.

En un principio, al evaluar el impacto del aprendizaje remoto en los niños diagnosticados con trastornos de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), se pensó que estarían entre los más perjudicados, ya que la falta de contacto con el docente y sus compañeros podía acentuar aún más sus dificultades intelectuales durante el proceso escolar. Sin embargo, encuestas recientes llevadas a cabo en Australia a padres de niños que sufren de TDAH, que actualmente se encuentran cursando sus estudios básicos, mostraron índices de una llamativa mejora en su rendimiento académico gracias a la educación desde casa. Cabe destacar que estos números no habrían sido posibles sin la participación y el seguimiento de sus padres durante el proceso.

Cómo afecta el trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH) puntualmente al desempeño escolar

Como ya sabemos, este trastorno suele despertarse durante la etapa escolar y afecta a alrededor de un 5 % de niños y adolescentes, cuyo desempeño académico se ve alterado por la falta de concentración, dificultades en la comunicación escrita u oral, bloqueos al momento de interpretar información, incapacidad para controlar impulsos, complicaciones para organizarse y establecer prioridades entre sus tareas habituales y horarios.

El acompañamiento de los padres en la educación durante el aislamiento

Los estudios realizados en Australia demuestran que la participación de los padres en las nuevas condiciones de enseñanza ha jugado un papel clave en el progreso y rendimiento de los estudiantes. Las siguientes son algunas recomendaciones que han resultado ser muy útiles en niños y adolescentes, y que se les puede aconsejar a los padres:

• Preparar un programa u horario junto con el niño para ayudarlo a seguir una rutina y mejorar su capacidad de organización y planificación de sus actividades diarias.
• Hacer un seguimiento de ese programa para verificar que el niño ha logrado completar sus tareas en tiempo y forma.
• Acondicionar propiamente el espacio de estudio, evitando cualquier tipo de distracción auditiva y/o visual.

Pautas para comunicarse con el niño e incentivar su desarrollo

Existen otras recomendaciones generales para padres y docentes al momento de abordar la problemática de un niño que sufre de TDAH. Estas recomendaciones se enfocan mayormente en el modo de comunicarse con el niño, con el fin de poder brindarle contención durante el proceso y reforzar su autoestima.

• Felicitarlo por un trabajo terminado o en proceso. Reconocer el esfuerzo detrás de su rendimiento y capacidad de organización motiva al niño a mantener el interés y el mismo nivel de conducta para sus actividades diarias.
• Consultarle desde el inicio de su tarea si ha comprendido las consignas establecidas.
• Escuchar con atención sus dudas y preguntarle puntualmente qué es lo que no comprende, sin hacer juicios sobre su nivel de comprensión que podrían desmotivarlo.
• Asegurarse de que el niño tenga momentos de descanso (la cantidad y duración de los intervalos dependerá de cada niño). Se recomienda iniciar con varios recesos y luego ajustar la cantidad según lo necesario.

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